El dinero virtual está ya más que implantado en nuestras vidas. Lo que se busca ahora es hacer que sea extremadamente fácil de usar para facilitar que compremos. Por eso Snapchat, un aplicación de envío de fotos y mensajes, ha añadido Snapcash, una función que permite enviar de dinero a otros usarios. ¿Y cómo nos hemos enterado de este nuevo invento? Pues… a través de su anuncio. Y la verdad, mucha confianza no nos ha dado.
Vemos a unos hermanos comprando un regalo para su madre y como vale 30 dólares, la chica le pasa la mitad a través de la aplicación. En el momento que la acciona un mundo interior se despierta: bailarines, colores, monedas, un banquero gordo y barbudo, claqué, un jingle interminable que nos habla de la facilidad y la comodida de usar la aplicación… Todo un festival.
La propuesta nos parece más bien ridícula y poco creativa, además de cursi. Entendemos que han querido ser “modernos” y hacer algo entre lo surrealista y lo divertido, pero no han tenido mucha puntería. De hecho aunque ha conseguido más de 1,5 millones de visitas, los votos negativos superan con creces a los positivos. Un caso claro de viralidad negativa.
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